Soy Eduardo Prádanos, fundador de la agencia creativa FLUOR Lifestyle. Soy también fundador del proyecto Innovación Audiovisual, director del Postgrado en Branded Content y Transmedia Storytelling de Inesdi y profesor en la EICTV.
WINA JOURNALIST / Cuál es el proyecto más complicado al que se ha enfrentado?
Si estamos hablando de proyecto profesional yo te diría que crear nuestra agencia FLUOR Lifestyle. Yo no tenía ningún tipo de experiencia previa como empresario y lo recuerdo como un momento complejo, con un montón de aspectos que no había tenido en cuenta previamente. Creo que el hecho de haber dedicado varios meses a desarrollar el posicionamiento y el concepto como compañía en todas sus vertientes nos ayudó mucho a luego poder despegar.
WINA JOURNALIST / Y de cual guarda el mejor recuerdo?
Sinceramente, guardo muy buen recuerdo de casi todos. Hemos aprendido mucho por el camino y así lo seguimos haciendo. Pero, más allá de un proyecto en concreto, yo siempre me quedo con el camino recorrido. Como dice Gregg Popovich, reconocido como uno de los mejores entrenadores de baloncesto de la historia y actual entrenador de los San Antonio Spurs de la NBA: “En realidad, la alegría no está en la culminación final. El disfrute está en el proceso”. Y eso es lo que intentamos tener muy claro siempre.
WINA JOURNALIST / Cuál es su valor diferencial como profesional o el de su agencia? Cuál es ese ingrediente que lo hace diferente e impacta a sus marcas?
Tener unos principios que son el fruto de un diálogo entre nosotros y dan sentido a todo lo que hacemos. Son cinco puntos muy concretos que todas las personas que trabajamos en FLUOR Lifestyle ponemos en juego en cada proyecto:
- Cumplimiento de nuestra palabra.
- Honestidad en el manejo del presupuesto de nuestros clientes.
- Amor por las artes del storytelling.
- Conexión entre tecnología y humanismo.
- Cooperación con profesionales transdisciplinares.
La aplicación de estos cinco principios produce el resultado que entregamos.
No obstante, lo que me preguntas lo deberían contestar nuestros clientes. Si no, la respuesta estaría demasiado sesgada hacia una percepción completamente subjetiva. Y para eso encargamos un estudio hace unos meses en el que participaron –entre otros- varios de nuestros clientes.
En el estudio nos decían que nos perciben como una empresa coherente entre los hechos y los dichos, lo que les otorga confiabilidad, y que mantenemos la honradez, honestidad y franqueza en un sector que, por desgracia y en determinadas prácticas, carece de estas cualidades. Que tenemos buena capacidad de integrar equipos y de reunir talento y que hay responsabilidad en la ejecución.
También se hablaba de nuestro método propio, que rompe con la lucha de egos a favor de hacer crecer las ideas desde la resonancia con los clientes, donde la creatividad crece al fuego del equipo desde una polivalencia profesional interna y externa que proviene de diversos ámbitos. También nos comentaban que tenemos un modo diferente de compartir con los clientes.
Ese estudio también nos reflejó aspectos que no hacíamos bien. Por poner algunos y no hablar solo de lo bueno: ser una empresa de reciente fundación aún no nos hacía ser vistos como los mejores aliados para determinados proyectos. También se veía que existía excesiva dependencia de determinadas personas del equipo. Eso nos podía hacer caer ya que si se debilitaban esas posiciones, se debilitaba claramente el equipo y se resentían los proyectos. Por otro lado, nos comentaron que aún estaba por ver cómo se generaba un crecimiento sostenible. Sobre todo esto ya venimos trabajando desde hace tiempo para seguir mejorando como compañía, hemos hecho grandes avances.
Fíjate que, por ejemplo, al principio uno de los errores que cometimos es no saber diferenciar la vida laboral y la personal. Todo estaba demasiado unido, fruto del enorme entusiamo ante lo que estábamos creando, por supuesto, pero no por ello era bueno. Ahora tenemos mucho más cuidado con eso. Por ejemplo, un detalle tonto pero que es significativo: cuando una persona se va de vacaciones se va con todas las de la ley, incluso le sacamos fuera de los grupos de WhatsApp para que esos días de verdad desconecte. Antes, el equipo seguía demasiado conectado al día a día de la oficina aunque estuvieran de vacaciones. Nos equivocamos en su día en esto pero me alegra saber que lo detectamos y pusimos solución.
Estamos muy orgullosos de experimentar este proceso. En el fondo, solo llevamos dos años y medio y ni en nuestros pronósticos más optimistas íbamos a estar así tan pronto. Pero no nos relajamos. Esto nos apasiona demasiado como para pensar que ya está todo hecho y no tenemos nada más que aprender.
WINA JOURNALIST / Cómo motivar a los equipos de trabajo en una industria tan competitiva, donde las multinacionales están buscando constantemente nuevo talento?
Es muy sencillo y a la vez muy difícil.
Muy sencillo porque se trata de entender y creer firmemente y con todas las consecuencias que lo más importante en una empresa son los trabajadores. Y los trabajadores, por delante de eso, son compañeros de trabajo y de viaje.
Y es muy difícil porque exige tener en cuenta que esto no se hace solo y se queda en un simple discurso, sino que hay que estar siempre pendiente de conversar y de dar voz a todos para saber en qué momento nos encontramos como colectivo para así conseguir que la orquesta suene lo más afinada posible.
De hecho, nosotros últimamente no hablamos de entrar a trabajar en nuestra empresa sino que lo llamamos acceder al “Programa FLUOR Lifestyle”. En el programa es importantísimo el desarrollo profesional, por supuesto, pero mucho más el personal. Fíjate, por ejemplo, con la gente más joven nosotros sentimos que sus padres delegan en nosotros cierta parte de su proceso de evolución como personas. Pasamos muchas horas juntos, de hecho, más que con nuestras familias en determinados momentos del año. Así que tenemos que interiorizar la enorme responsabilidad que tenemos con ellos. De hecho, los más jóvenes tienen que cumplir estos tres aspectos y por este orden: aprender, aportar y divertirse. En los seniors este orden se invierte y es aportar, aprender y divertirse. Pero siempre ha de tener esos tres ejes. Cuando en alguna ocasión no ha funcionado tras intentarlo, hemos hablado mucho entre las personas que trabajamos en la compañía desde hace más tiempo y hemos tomado decisiones muy meditadas y unánimes, siempre por el bien la empresa y el colectivo.
Hemos subido el sueldo a todas las personas del equipo sin que ninguna de ellas lo haya tenido que pedir. Con varias de ellas, incluso, les dijimos: “Dinos cuánto quieres cobrar”. Y ellos, dentro de su responsabilidad y tras meditarlo, nos propusieron una cantidad y así se efectuó. Sin regateos ni cláusulas extrañas.
Por otro lado, la empresa paga un máster a cada persona. Y no ponemos compromisos de permanencia, en plan “te pagamos esto pero a cambio tienes que estar con nosotros un determinado tiempo o serás penalizado”. La formación es importantísima para nosotros.
Por supuesto, hemos cometido errores sobre los que hemos reflexionado mucho en voz alta para así aprender a no tropezar de nuevo con la misma piedra. Somos súper exigentes con nosotros mismos pero eso no nos lleva a penalizar el error. Hablamos mucho, muchísimo, creo que eso es clave. Hay una cafetería con una terraza cerca de nuestra oficina donde la gente nos ve y nos dice: “¡Qué bien estáis ahí, sin trabajar!”. Y nosotros sonreimos porque en realidad siempre estamos hablando de cómo mejorar algo o repasando algún proyecto. Pero debe de ser que no tenemos la cara habitual cuando se trabaja y por eso la gente cree que estamos ociosos.
También hacemos planes juntos, los justos, sin abusar, porque cada uno debe tener su independencia. Pero sí aproximadamente tres al año. Uno de ellos es irnos de festival, hemos estado ya en varios y en breve vamos a otro. Aunque siempre hay mucho cachondeo por lo que escucha cada uno cuando pone los altavoces en voz alta en la oficina, hemos encontrado en la música en directo un punto de unión fuerte. Dentro de poco vamos a destinar una partida de nuestro presupuesto en elegir en qué gastarla. La gente podrá exponer libremente en qué creen que será mejor, lo votaremos y la opción que gane se llevará a cabo. Le dedicamos el mismo tiempo a nuestros clientes que a cuidarnos a nosotros mismos como equipo. Es igual de importante.
Por otro lado, creemos mucho en el hecho de que compartir conocimiento es una de nuestras piedras angulares. Por eso, preparamos a la gente para que pueda comenzar a dar alguna clase específica de un tema que controlen, al principio tutelados de la mano de alguien que tenga experiencia para que así -un tiempo después y cuando se sientan seguros- puedan volar solos e incluso creen su propio discurso y línea pensamiento.
Y, además, nos gusta mucho nutrirnos de otros profesionales que tienen otras empresas, es muy habitual ver pasar por FLUOR Lifestyle a personas que vienen a darnos alguna formación o simplemente a charlar con nosotros. Esas personas son ya amigos que forman parte de nuestro ‘connect and develop’, nos ayudan mucho a crecer incluso como consejeros de cabecera a los que consultar si hacer algo o no e incluso abordamos proyectos junto a ellos frecuentemente.
Creo que todo esto hace que estemos orgullosos de nosotros y de nuestra evolución en tan poco tiempo. Y eso hace que la gente esté motivada y con ganas de seguir creciendo aquí.
WINA JOURNALIST / Son los buenos resultados en una campaña son el resultado final de un buen proceso estratégico o de un proceso creativo?
Primero, estratégico. Sin estrategia, todo lo demás son ideas felices. Aunque, ojo, el concepto “estrategia” está muy devaluado. Hace unos años, llegué a ver una propuesta a una marca bastante importante en la que la supuesta “estrategia” era una sucesión de concursos a lo largo del año.
Nosotros tenemos un método propio para abordar los procesos estratégico-creativos que ponemos en marcha desde la recepción de un brief. Es un proceso metódico y compacto que hemos ido mejorando con los años. Lo creé en 2011 y hasta hoy ha experimentado muchas variaciones gracias a los aportes y mejorías de varias personas importantes para nosotros hasta llegar a lo que es hoy. Es la misma metodología que utilizamos en el Postgrado en Branded Content y Transmedia Storytelling de Inesdi que dirigimos y en nuestros talleres en la Escuela de Cine y Televisión de Cuba.
WINA JOURNALIST / Qué piensa de la industria indie?
¡Qué te voy a decir de esto…! Me encanta.
No me suele gustar lo que sea tendente a centralizar todo dentro de estructuras multinacionales, se pierden muchos matices y se “industrializan” oficios que, en gran medida, tienen mucho de artesanía mental.
Pasé por esos entornos, los conocí y me di cuenta de dónde está lo que yo percibo como verdadero valor. Y, desde luego, suele estar en estructuras más ágiles y bien conectadas. La grandeza no la da el tamaño.
WINA JOURNALIST / Cual es actualmente el mayor reto de su agencia indie?
Mira, en España el 90% de las empresas cierran antes de cumplir dos años. Nosotros ya hemos superado esos dos años y seguimos dando guerra.
Nuestros dos primeros años han servido para darnos a conocer, crear un equipo compacto y hacer que la mayoría de los clientes que nos contrataron una vez hayan repetido o incluso ya sean habituales. Hemos ganado 13 premios junto con nuestros clientes, varios de ellos muy importantes e incluso internacionales. Así que quejarnos no sería justo.
Como te comentaba al principio, el hecho de seguir disfrutando durante el camino es lo que más nos importa. Así es como podremos superar los retos que se nos presenten.
WINA JOURNALIST / Qué piensa de WINA y su figuración en la pasada edición en Los Angeles?
Creo que es muy importante que haya unos premios así, donde las agencias que no pertenecemos a ningún holding internacional podamos tener un espacio donde exhibir nuestros trabajos e inspirarnos en lo que hacen las demás, además de aprender de y con ellas.
- WINA JOURNALIST / ¿Cómo se inspira? Leyendo y conversando. Me gusta apuntar siempre cosas que me llaman la atención en el móvil para luego investigar sobre ellas cuando tengo un rato.
- WINA JOURNALIST – ¿Su mayor motivo de vida? Intentar ser cada día un poquito mejor persona.
- WINA JOURNALIST – ¿Su mayor motivo profesional? Intentar ser cada día un poquito mejor profesional.
- WINA JOURNALIST – ¿Creer, crecer o crear? En orden de prioridades: crecer (pero, ojo, no entendido como crecimiento económico sino personal), crear (creando creces) y creer (no puedes crecer ni crear sin creer).
- WINA JOURNALIST – ¿Su medio favorito en el cual pautar sus estrategias? Primero una buena historia, luego ya pensaremos en qué medios se desarrolla.
- WINA JOURNALIST – ¿Cómo se ve en 5 años? Con alguna cana, aunque espero que no sean demasiadas.